Elementos a definir en la elaboración de una memoria
Las memorias anuales no solo son un requisito legal. Es la manera de demostrar dónde está tu empresa y dónde quieres llegar.
Es una declaración de intenciones, por lo que debe ser impactante.
Es una herramienta de marketing potente, que puede ser una carta de presentación para clientes e inversores.
Vamos a analizar los puntos clave de una buena memoria anual.
Imagen de la memoria
La apariencia de empresa es esencial. Debe presentar una imagen cuidada y que respecte nuestra imagen corporativa.
El diseño es importante ya que son documentos que recogen muchos datos, por lo que debemos conseguir un aspecto atractivo. Además, tiene que demostrar el impacto humano de la empresa. No debe ser un resumen frío de datos, tiene que hacer llegar un mensaje a posibles inversores o clientes.
El contenido de la memoria
La memoria es un resumen de lo que ha pasado durante el año, por lo tanto, el contenido debe estar bien documentado. Debes saber que aspectos destacar de tu empresa y también es importante tener en cuenta quién será el receptor final.
Estructura de la memoria
Debe tener una estructura clara y ordenada. Tiene que ser de fácil lectura.
Lenguaje de la memoria
Debemos utilizar un lenguaje correcto, apostando por la sencillez y claridad.
Incluir gráficos e imágenes
Es muy importante apoyar los datos con imágenes relevantes y gráficos. De nuevo el diseño gráfico es fundamental ya que hará nuestra memoria más atractiva.
El formato de la memoria impresa
Podemos elegir la memoria impresa o digital. Una memoria impresa siempre sorprenderá al lector. Transmite la preocupación de la empresa por su imagen corporativa y al mismo tiempo genera confianza, ya que demuestra la inversión de la empresa en su imagen.
La utilización de un papel adecuado hará que nuestra memoria luzca más y sea más impactante. También podemos sorprender al lector utilizando formatos inesperados o incluso incluir algún regalo promocional.
